Algunos aspectos de nativos del 4, 13, 22 o 31 de cualquier mes


Motivos fundamentales:
Están representados por un ardiente deseo de independencia personal, tan exclusiva que hace dfícil la adaptación al medio o a las personas y tan celoso de esa independencia que o bien obliga a que este nativo se someta voluntariamente a un régimen rutinario que proteja dicha independencia, o lo conduce a la osadía más extremista, en ambos casos convirtiendo estos seres en almas solitarias, incomprendidas en sus ideas, lastimadas en sus afectos y teniendo que vencer una larga serie de oposiciones en cada paso que dan.

El camino a recorrer:
El objetivo fundamental del nativo de estos días consiste en la conquista de poder, ya sea material o espirirutal, sobre las personas o las circunstancias. Para ver logrado ese objetivo está dispuesto a todos los sacrificios y se siente animado a todas las tentativas, en primer lugar empleando la palabra hablada, en segundo, sirviéndose de la escrita, y en último término apelando a la espada.
Los tres medios pueden ser en su caso, factores decisivos para conseguir lo que desea, pero cada uno de ellos también puede convertirse en causa determinante para perder lo que le interesa conservar.

Las finanzas:
Hay capacidad para ganar dinero; también la hay para perderlo, ambas cosas por caminos imprevistos y dónde y cómo menos lo espera. Las ideas nuevas, los negocios relacionados con la electricidad, la mecánica, los transportes, la cura de enfermedades por procedimientos originales, son buenos campos de inversión o actuación.

La fama:
Es de esperar que habrá fama para lo que esta persona haga, pero carencia de calor y aprecio para ella.

La salud:
Una vitalidad de sólidos fundamentos, provee con constancia a las necesidades de un organismo activo y persistente, pudiendo decirse que los padecimientos son más bien ocasionados por los percances que puede sufrir que por debilidad de su estructura física. Conviene, pues, que se precava de los accidentes y agresiones, especialmente heridas en piernas y pies.


FUENTE: La Cabala de la predicción, de J. Iglesias Janeiro

No hay comentarios:

Publicar un comentario